17 ago 2012

365


Renovarse o morir. Lo cierto es que tenía ganas de hacer cambios en el refugio, pero no encontraba una forma sencilla, cómoda y rápida para compartir mi nueva pasión por la fotografía con los muchos que por alguna razón se niegan a entrar en las redes sociales. Aunque este no es el tema, hay que reconocer que a pesar de la controversia que generan, su proliferación deja indiferente a pocos. Pudor, temor, desconfianza, exhibicionismo, falsedad, cotilleos son adjetivos tan escuchados como: oportunidades, contactos, amigos, ideas, grupos, eventos, quedadas. En fin, cada uno es como es.
El caso es que desde hace unos meses estoy subiendo algunas de mis fotos a Facebook, en un álbum llamado 365 (cada día una foto). Aunque esto no es del todo cierto, hago y subo las fotos cuando puedo o quiero. Ahora, gracias a “cooliris” podéis moverlas de forma sencilla o incluso verlas a tamaño completo con una calidad aceptable.
Tengo que reconocer que estoy disfrutando con este nuevo y estático mundo de “la foto”. Voy despacio, viendo, aprendiendo, preguntando y escuchando. No busco más que eso, imágenes bonitas o interesantes, momentos.
A pesar de esta nueva afición, Rubén y yo seguimos maquinando cortos y en breve nos pondremos en marcha con una nueva historia: “La Serrana”. Será nuestra versión de esta leyenda verata.
Un saludo a todos desde mi refugio veraniego. Hasta pronto.